En el corazón de Puigcerdà, La Cerdanya, hemos llevado a cabo un proyecto de reforma integral de una casa de los años 1930. Este trabajo se ha realizado con el máximo cuidado y dedicación para preservar su esencia y honrar su historia.
La recuperación de elementos originales, como las cornisas, las vigas y los techos, ha sido clave para mantener la elegancia y el carácter de la vivienda.
Desde el primer paso en el recibidor, los acabados en madera de roble y los tonos cálidos conectan con la autenticidad de una época pasada. La entrada se convierte en un espacio acogedor que delimita sutilmente las áreas, permitiendo al mismo tiempo que la luz natural fluya a través de la gran ventana principal.
La reforma combina materiales nobles con un diseño que equilibra tradición y modernidad. Cada rincón ha sido diseñado para reflejar calidez, confort y una estética armoniosa, creando espacios funcionales que respetan el carácter histórico de la vivienda.
El resultado es una vivienda que une el encanto y la personalidad de otra época con las comodidades de la vida moderna. Este proyecto destaca por su capacidad para conservar una historia única, transformando cada detalle en un homenaje al pasado mientras se adapta a las necesidades del presente.
Reportaje de la revista El Mueble